Es innegable que los niños son como pequeñas esponjas. Dependiendo del ambiente en el que se críen y los estímulos a los cuales sean expuestos, los chiquillos podrían convertirse en los grandes ciudadanos del mañana.
De acuerdo al neurocirujano español Manuel Pedrosa, durante los primeros cuatro años de vida es cuando más conexiones neuronales se forman. Es por este motivo que incentivar a los pequeños a aprender un segundo idioma debe comenzar lo antes posible.
Los beneficios de aprender una segunda lengua a temprana edad van más allá de los cognitivos (buena memoria, riqueza de vocabulario, buen uso de la gramática y mayores niveles de concentración). Por ejemplo, los niños bilingües tiene la ventaja de acercarse a otra cultura: este acercamiento ampliará sus conocimientos y le hará una persona que ve las diferencias como algo positivo. Un pequeño bilingüe también tiende a ser más extrovertido, pues su conocimiento de un segundo idioma expande el circulo de personas con las cuales puede comunicarse y posteriormente formar vínculos. Ni que hablar de los beneficios que los niños bilingües tendrán cuando crezcan. Además de disfrutar de mejores oportunidades laborales, también está comprobado que las personas con dominio de un segundo idioma tienen una mejor salud mental al llegar a la vejez.
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Si bien aprender un segundo idioma desde pequeño trae beneficios increíbles, el primer obstáculo que todo padre se encuentra es que ningún pequeñín quiere tomarse su tiempo para estudiar alguna cosa; en su lugar, los niños disfrutan de las rimas y la música. No obstante, estas preferencias también pueden jugar a favor del educador, al aprovechar ambos elementos para empezar la exposición del pequeño al segundo idioma, por ejemplo, a través de videos que enseñen rimas o canciones. De esta manera el niño empezará el aprendizaje de la segunda lengua de la misma manera en que aprende la materna: primero escuchando, luego comprendiendo siguiéndole hablando y finalmente escribiendo.
Como educador, ¿qué medidas en específico podrías tomar para que se apasione por el idioma?
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Mira la tele y las películas en el segundo idioma. De esta manera el pequeño se interesará en entender que está pasando en la película. Además, se le hará más interesante aprender la lengua.
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Cómprales libros sencillos en un segundo idioma. Los libros con letra grande e imágenes coloridas captaran la atención del pequeño.
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Descarga aplicaciones para dispositivos móviles que les ayuden a practicar la segunda lengua. Algunas aplicaciones están especializadas en contenido educativo en videos. Otras apps se dedican a los juegos y acertijos y también están aquellas que comparten audio libros.
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Inventa tus propios juegos y dinámicas que les enseñen a los peques más vocablos en el segundo idioma. Por ejemplo, proponle al peque jugar al bingo en inglés.
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